Llegó el frío y con él todos los problemas de la piel. Así como el bronceado del verano nos queda divino, el invierno tiene el efecto contrario en nuestra apariencia. De un día para el otro la piel pierde todas sus cualidades: la luminosidad, la hidratación, el color…
¿Te diste cuenta que durante el invierno sentís la piel tirante, acartonada y seca? Esto se produce como una reacción de nuestro cuerpo para proteger a los órganos internos del frío. Aunque parezca imposible revertir esta situación, si utilizamos cremas con siliconas a la mañana y a la noche el cambio se hará visible rápidamente. Las cremas de almas marina, por ejemplo, son muy útiles para combatir estos males.
¿Te sentís cada día más pálida y sin gracia? Cuando llega el invierno, el frío nos impide broncearnos bajo el sol. Así, pasamos de la piel dorada y luminosa, a tener la cara pálida y sin vida. Para que esto no nos pase podemos recurrir a las milagrosas cremas autobronceantes que, con aplicaciones periódicas, nos dan un look bastante veraniego. Un detalle para tener en cuenta: buscá un tono similar al de tu piel y si querés andá oscureciéndolo de a poco; no sea cosa que de un día para el otro tomes un color caribeño porque va a ser muy evidente.
¿Cómo evitar que se nos paspen y agrieten los labios con el frío? Aunque no nos demos cuenta, los labios son los más amenazados durante el invierno. Por un lado, porque por naturaleza no están preparados para afrontar bajas temperaturas ya que no tienen ningún sistema interno de regulación de temperatura. Por otro lado, no hay abrigos textiles para nuestros labios, como la cabeza tiene a los gorros y las manos a los guantes. Para curar los labios lastimados valen las ceras, bálsamos y fórmulas cicatrizantes. Si querés evitar que se te lastimen, aplicate por las mañanas y antes de acostarte.
¿Se te enrojece la cara durante el invierno? Generalmente, sucede cuando se producen cambios bruscos del frío al calor. Durante el invierno es muy común pasar de ambientes calefaccionados a la intemperie lo que genera un ataque contra nuestra piel. Las mujeres que tienen mayor sensibilidad sufren más este problema y, en muchos casos, se puede generar una eritrosis que es cuando se genera una rojez difusa y persistente en la piel. Si este es tu caso, la mejor forma de prevenir estas afecciones es utilizando cremas que moderen tus reacciones cutáneas (las más convenientes son las que poseen omega 3 y 6).
La mejor forma de enfrentar al frío es con la prevención. No se trata sólo de desesperar cuando sentimos la piel tirante o cuando nos arden los labios. Se trata de cuidar nuestra piel todos los días para llegar divinas al invierno y para mantener nuestra belleza durante los meses más fríos del año.