¿Qué se puede y qué no se puede hacer durante el embarazo?

Deportes, ¿Hasta cuándo?

¿Puedo hacer deportes estando embarazada? ¿Puedo seguir hasta el último trimestre? ¿Qué recaudos debo tomar? Evacuamos todas tus dudas.

Te enteraste de que estás embarazada, pero no querés dejar de cuidarte y estar en movimiento. Aunque hoy en día las futuras mamás son súper activas, todavía está en el imaginario popular la idea de que estando en la dulce espera hay que moverse lo menos posible. Por suerte, las mamás modernas van desterrando este concepto y buscan estar en forma y hacer actividad física para sentirse mejor y lograr un buen parto.Pero lo que no hay que perder de vista es que si bien podés hacer gimnasia especializada y natación sin problemas, hay disciplinas que tendrás que suspender o evitar.

• Gimnasia sí, hockey no

Durante la gestación podés hacer actividad física especializada y adaptada para embarazadas desde el momento en que el obstetra te de el certificado médico e incluso hasta el mismo día de ir a dar a luz. Además de mantenerte en forma y tonificar los músculos, estas disciplinas –ya sea gimnasia, yoga, acquagym o natación específicas para mamás gestantes te ayudará a prevenir dolores posturales típicos de esta etapa como a fortalecer el piso pelviano, fundamental para tener un buen parto.

En cuanto a los deportes, todos aquellos que sean de impacto, impliquen cambios bruscos de posición, postura o peligro de golpes entre compañeras de equipo o con algún elemento – como hockey o sky- debés dejar de practicarlos apenas te enteres de que vas a ser mamá.

Como aclaración, es importante tener en cuenta qué tipo de actividad física hiciste antes de estar en la dulce espera, ya que si, por ejemplo, sos deportista de alto rendimiento o bailarina profesional, podrás hacer rutinas de trabajo diferentes al común de las embarazadas. En esos casos se realizan planes especiales de actividad.

• Recaudos a tener en cuenta

A la hora de decidirte por una actividad, tené en cuenta estos consejos:

• la frecuencia cardíaca no debe elevarse a más de 130, 140 latidos por minutos.
• No debés transpirar en exceso.
• No debés sobre exigirte.
• No realices actividades con alto impacto.
• Es fundamental tomar agua, antes, durante y después de la actividad, para evitar la deshidratación.
• No realices ejercicios que se focalicen en el abdomen o lo presionen.

Lic. Mariela Villar Directora de EMBARAZO ACTIVO

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