Rabietas: Qué hacer y qué no

Nunca está de más recalcar que todo se debe enseñar desde el ejemplo. Cuando se queme la comida o algo salga mal en casa, es importante que los padres no reaccionen con “rabietas adultas” y que le enseñen a su hijo a buscar soluciones a los problemas en lugar de enojarse.

 

Qué hacer cuando tu hijo tiene una rabieta.

• Evite darle importancia a las rabietas. Tómese un tiempo para evitar una reacción desmedida, para tomar aire y pensar cómo va a actuar. Trate de no convertirse en el público del show de su hijo. Si es necesario, mire para otro lado, vaya a otra habitación.
• Permanezca firme: Su hijo está aprendiendo a ser realista, ya que no puede tener todo lo que quiere, y sus padres están aprendiendo a ser consistentes y a fijarle los límites.
• Conserve la calma: Esto le enseña a su hijo desde el ejemplo.
• Una vez terminado el escándalo: Elogie a su hijo por superar el momento y poder controlarse.

 

Que NO hacer ante la rabieta de su hijo

 

• Tratar de razonar durante la rabieta. Él no la está escuchando, es una pérdida de tiempo.
• Menospreciarlo: “Niño malo ¿no te da vergüenza actuar así?” Este tipo de respuesta puede hacer que el niño pierda el respeto por sí mismo y sentir que no merece lo que quiere.
• Recordar la rabieta más tarde: Sólo le otorga más importancia a esa conducta.

 

Fuente: Disciplina sin gritos ni palmadas , Editorial Norma