En términos generales, se trata de una sustancia natural de la sangre que interfiere con el proceso de la coagulación sanguínea y actúa sobre una sustancia llamada trombina, que desempeña un importante papel en la formación del coágulo en la sangre.
Su obtención industrial es a partir del pulmón bovino y de la mucosa intestinal del cerdo. Es una cadena de polisacáridos con peso molecular entre 4 y 40 kDa que actúa como cofactor de la antitrombina III, inhibidor natural de la trombina.
¿Para qué sirve la heparina?
La heparina(del griego ηπαρ, hepar, "hígado") es el anticoagulante de elección cuando se requiere un efecto rápido, ya que su acción es inmediata cuando se administra por vía intravenosa. Inhibe la acción de varios factores de la coagulación, además de tener cierta acción sobre las plaquetas y el sistema fibrinolítico. La heparina no fraccionada, a diferencia de la de bajo peso molecular, se utiliza en dosis bajas para la profilaxis primaria y en dosis altas para el tratamiento de la trombosis. En este caso, su efecto anticoagulante debe ser monitorizado y la dosis, ajustada frecuentemente.
Si bien se suele aplicar para la prevención y tratamiento del tromboembolismo venoso, se la considera útil para el tratamiento precoz de la angina inestable e infarto agudo del miocardio, en cirugía cardíaca con circulación extracorpórea, hemodiálisis, cirugía vascular, durante y después de la angioplastía coronaria y en casos seleccionados de coagulación intravascular diseminada, entre otras indicaciones. Este anticoagulante se suele utilizar solo o en combinación con aspirina para evitar abortos espontáneos y otros problemas entre las mujeres embarazadas con ciertos padecimientos.
Como bien fue mencionado anteriormente, las presentaciones de la heparina son una solución que se inyecta por vía intravenosa o subcutánea profunda, y una solución diluída, menos concentrada, que se aplica mediante catéteres intravenosos, evitando la inyección en el músculo. Cuando se usa para prevenir la formación de coágulos en los catéteres intravenosos, por lo general se aplica al colocar el catéter, y luego cada vez que se extrae sangre o administra algún medicamento a través de éste.
¡Atención con los alérgicos!
Antes de administrar una dosis de dicho anticoagulante, es fundamental comunicarle a su médico de cabecera si es alérgico a esta sustancia, a otros medicamentos, a los productos de res o de cerdo, o a cualquier ingrediente de la heparina inyectable; qué medicamentos con y sin receta, vitaminas, suplementos nutricionales y productos herbales está tomando o piensa tomar; si tiene pocas plaquetas (tipo de células sanguíneas necesarias para la coagulación normal) y si tiene sangrado abundante e incontenible en cualquier parte del cuerpo; si está embarazada, planea estarlo o está dando el pecho; si le van a hacer una cirugía, incluyendo una cirugía dental; si fuma o consume otros derivados del tabaco, y también si deja de fumar durante su tratamiento.
Efectos secundarios
A pesar de tratarte de una solución efectiva para el correcto desenvolvimiento de numerosos procesos, la misma puede provocar efectos secundarios, tales como enrojecimiento, dolor, moretones, llagas en el sitio de inyección de la heparina o caída del cabello. Otras consecuencias pueden ser aún más graves, tales como sangrado o moretones anormales, vómito sanguinolento, sangre fresca en las heces o heces negras, o sangre en la orina. En este caso, se recomienda consultar al médico y farmacéutico en forma inmediata para prevenir reacciones que puedan ser mayormente contraproducentes.
Dr. Sergio Sarquis
Médico clínico
El fin de este artículo es proporcionar información a las usuarias de materna. Es solo informativo y bajo ningún concepto reemplaza la consulta médica.