La Eutonía es un método de trabajo corporal que estimula el autoconocimiento del cuerpo y de sí mismo. Favorece el desarrollo de la conciencia observadora sobre el funcionamiento del propio cuerpo, a partir de explorar diferentes posibilidades de percepción y movimiento. A partir del trabajo eutónico se desarrolla una corporalidad consciente que impacta directamente sobre el manejo cotidiano del cuerpo. Durante el embarazo ayuda a fortalecer el vínculo con el bebé, relajar los músculos y aliviar las molestias.
“Eutonía” proviene del griego y significa Eu: bueno, óptimo y Tonos: tensión: tonicidad armoniosamente equilibrada en adaptación constante al estado o actividad del momento.
Esta disciplina incluye dos dimensiones: la física y la psicológica.
A nivel físico alivia tenciones y dolores, favorece la recuperación de la movilidad de las articulaciones, mejora la postura corporal y facilita el descanso.
En el plano psicológico la eutonista Silvia Cristina Di Marco nos explica: “Ayuda a comprender el funcionamiento del cuerpo físico en relación a los pensamientos y a las emociones, y reconocer la necesidad de vivir integrados. Al confiar en la constitución y sabiduría del cuerpo físico se logra descender el nivel de ansiedad. Se aprende del amor y respeto por uno mismo para luego aplicarlo en el ser que nacerá.”
En el proceso de autoconocimiento cada mujer tiene la posibilidad de escucharse a sí misma y elegir conscientemente lo que le hace bien como sostén personal.
La Eutonía se puede practicar durante todo el embarazo. El tiempo de gestación es muy dinámico y cada abordaje conecta con nuevas percepciones. Se puede realizar hasta el momento previo al parto y continuarlo durante el período del puerperio.
Una ayuda para el dolor
El objetivo es no intervenir desde las dudas y los miedos, sino actuar desde el autoconocimiento y la confianza en el propio cuerpo.
“El dominio del tono muscular según los momentos y las etapas previas al nacimiento es de gran ayuda: puede direccionar las fuerzas internas durante el pujo. Es poner todo el ser a disposición de lo que se está viviendo, un ‘permitir dejar hacer’ al cuerpo sabio.” Nos indica Silvia Cristina Di Marco
Una reconciliación con el cuerpo nuevo (postparto)
La mujer transita por tres cuerpos: el cuerpo previo al embarazo, el cambiante cuerpo durante el embarazo y el cuerpo post embarazo, que tiene que ir sanando cuando el embarazo finalizó. El autoconocimiento y valoración del cuerpo propio que trabaja la Eutonía ayuda a calmar las angustias que este movimiento puede generar.
En el proceso de aceptarse y valorarse, la mujer madre logra un estado de autoconfianza que impacta directamente sobre su maternidad y vínculo con el bebé.