A las cuestiones prácticas de cómo se va a encarar la atención de los bebés una vez nacidos, se suman los cuidados inmediatos que deberán respetarse en el embarazo gemelar (*) para que éste llegue a buen término.
Por parte del médico habrá un seguimiento estricto del embarazo, ya que todo embarazo múltiple está considerado de alto riesgo. ¿Por qué? Algunas dolencias como la amenaza de parto pretérmino, la preeclampsia (hipertensión arterial provocada por el embarazo) y el polihidramnio (exceso de líquido amniótico), tienen mayor incidencia en un embarazo múltiple.
Los cuidados especiales que deberá tener en cuenta la embarazada son hacer una dieta adecuada y tener amplia disponibilidad de descanso. Se le indicarán suplementos vitamínicos, calcio, hierro y ácido fólico y es aconsejable contar con el asesoramiento de un nutricionista. La ingesta de líquidos tiene que ser abundante, ya que la deshidratación puede ser uno de los factores asociados al parto pretérmino.
Van a ser necesarias más visitas al obstetra y mayor frecuencia de controles ecográficos para hacer el seguimiento correcto de la evolución del embarazo. Probablemente, el tamaño que adquiera la panza sea mayor desde meses tempranos, que en el caso de un embarazo único.
Cuando el embarazo está avanzado, es difícil que la mamá encuentre una posición cómoda para descansar y probablemente tenga que buscar mayores oportunidades de descanso que una futura mamá de una gestación simple.
Características usuales:
- El período crítico de un embarazo gemelar es el de la semana 26 hasta la 32. Hasta entonces, es imperativo evitar que se produzca un parto pretérmino. El obstetra dará indicaciones estrictas a la embarazada y le advertirá de las posibles señales que indican una amenaza de parto pretérmino.
- Alrededor del 50 por ciento de los embarazos de mellizos nacen antes de la semana 37 de gestación.
- La ruptura prematura de las membranas es dos veces mayor que en el embarazo de un único bebé. Seguramente esto se da porque en estos embarazos son más frecuentes las contracciones, la placenta se ubica más abajo y porque se produce una dilatación cervical pasiva.
- A partir de la semana 32, puede notarse una diferencia en el crecimiento de los gemelos. Al nacimiento puede existir una diferencia de hasta 400 gramos entre uno y otro.
- Si se llegara a dar una ruptura prematura de membranas y no existe infección -y dependiendo de la semana de embarazo en que se encuentre la gestante- el obstetra tal vez espere para producir el parto, ya que es vital que los bebés maduren lo suficiente.
- Si existiera amenaza de parto pretérmino, el consenso entre los obstetras es recetar corticoides para asegurar la maduración pulmonar de los bebés.
- La preeclampsia es de 3 a 5 veces más frecuente en este tipo de embarazos que en los simples. El tratamiento no varía del de un embarazo normal, salvo en la elección cuidadosa que hay que hacer en este caso de la fecha de parto (para que los bebés estén maduros) .
- La anemia tiene una frecuencia de 15 % en estos embarazos. Por eso se aconseja tomar suplementos con ácido fólico y hierro durante la gestación, siempre con la supervisión del médico.
Algunas estadísticas:
- El 12 % de los recién nacidos prematuros son resultado de embarazos gemelares.
- El nacimiento de trillizos es de uno en 7.600 embarazos. (Los nacimientos de quintillizos y sextillizos son excepcionales, salvo en los casos en que ha existido estimulación de la ovulación).
- La incidencia de gemelos fraternos varía entre países y grupos raciales, mientras que la de los gemelos monocigóticos se mantiene constante. En los Estados Unidos es de aproximadamente uno en 90 casos.
- Un tercio de los mellizos son gemelos idénticos.
- En promedio, los gemelos tienen un período de gestación más corto. Nacen habitualmente a las 37 semanas de gestación en vez de las 40, por las restricciones de espacio que sufren y por otros factores externos.
- Tienen, habitualmente, menor peso al nacer que los bebés de gestación única.
- En la Argentina, la frecuencia de gemelaridad es de 9,3 por cada 1.000 nacimientos.
(*) Hay dos tipos de gemelos: los que son idénticos entre sí que se denominan gemelos idénticos o monocigóticos, que se originan en un único óvulo fecundado por un espermatozoide. Como provienen de una división celular, el sexo de estos gemelos siempre es el mismo. Pero la gemelaridad más frecuente es la de los gemelos fraternos o dicigóticos, que se debe a la liberación más o menos simultánea de dos óvulos y la fecundación de los mismos por dos espermatozoides. Estos son dos hermanos que se gestan al mismo tiempo. En este caso el sexo de los gemelos puede o no coincidir.