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¿Sabré reconocer el trabajo de parto?

¿Sabré reconocer el trabajo de parto?

Las contracciones regulares y progresivas indican que ha comenzado el trabajo de parto. ¿Qué hay que controlar? ¿En qué puede ayudar el papá? Otros síntomas, como el tapón mucoso o la fisura de bolsa, ¿son indicadores confiables? Ante la duda, siempre es mejor actuar, sin tener miedo al papelón de la "falsa alarma".

¿Sabré reconocer el trabajo de parto?

Estoy teniendo contracciones, venite con el bolso así vamos a la clínica”. Con toda la tranquilidad que la caracteriza, Soledad –cuyo embarazo ya estaba en término– llamó a su marido desde la casa de su madre, a donde había ido de visita. Mientras bajaban en el ascensor hacia el auto, no le quedaron dudas de que el trabajo de parto había comenzado: sintió que “rompía bolsa”. Treinta minutos y dos pujos más tarde, nació Manuel .

No todos los bebés nacen en 20 minutos -¡y muchos menos los de primerizas!-, como tampoco todos los trabajos de parto comienzan con señales tan claras como los de esta mamá. Cuando los indicios no son tan evidentes, ¿cómo reconocer el trabajo de parto? 

Todo empieza en el momento en que el bebé decide que ya es hora de salir al mundo y emite desde su cerebro una serie de mensajes químicos. Así, se desencadenan en su mamá una serie de reacciones hormonales, que abren la puerta a las prostaglandinas y la oxitocina, que provocan las contracciones de parto.

El doctor Ernesto Beruti, del Servicio de Obstetricia del Hospital Universitario Austral, explica: “El síntoma de parto que tiene más valor es la aparición de contracciones uterinas. El útero se endurece ocasionando molestias en el vientre y en la espalda. Estas sensaciones dolorosas son intermitentes, progresivamente rítmicas y persisten a pesar de cambiar de posición o levantarse de la cama. Pueden ir acompañadas de pequeñas pérdidas de sangre. A partir de este momento la paciente debe abstenerse de ingerir comida sólida, pero puede tomar agua, té o caldo. Si bien le serán explicados en detalle en el curso de preparación todos los síntomas de comienzo del parto, debe saber que cuando las contracciones sean cada vez más frecuentes (cada 5 a 10 minutos durante una hora, u hora y media) debe consultar con la partera y/o concurrir al Hospital. Las contracciones se cuentan desde el comienzo de una hasta el inicio de la siguiente”. 

Lo ideal es que las contracciones sean controladas con el papá del bebé, con una mano en la panza de la mamá  y la otra en el reloj. Una buena manera de percibirlas es colocando la mano en la región del ombligo: fuera de la contracción se podrán hundir los dedos y palpar partes del bebé, mientras que durante la contracción, no. Algunas mujeres describen las contracciones como un retortijón intestinal (incluso a veces van acompañadas de diarrea) o como un dolor menstrual, pero mucho más intenso. Suelen durar entre 30 y 70 segundos, conforme progresa este proceso.

Otros síntomas del parto verdadero son pérdidas color rosado con un veteado sanguinoliento y la ruptura de bolsa, que sin embargo sólo en el 15% de los casos se produce antes de que empiece el parto (muchas veces es el profesional quien debe hacerlo artificialmente durante el parto). 

Un párrafo aparte merece la pérdida del tapón mucoso, una mucosidad color rojizo, muy viscosa y pegajosa. Éste no es un buen indicador porque puede ocurrir tanto algunas horas antes del parto, como con semanas de anticipación. En cualquier caso, siempre se debe consultar al médico .  

Cuando los padres crean que ha llegado la hora, deben llamar al médico o partir hacia la clínica. ¿Y si no están completamente seguros? No importa:  no hay que esperar a tener un 100 por ciento de certeza. Es que muchas veces esa duda es la que permite llegar con tiempo a la clínica y encarar el parto con tranquilidad. Aunque sea de noche, fin de semana o feriado, ante la duda es preferible actuar. Los profesionales que atienden partos están acostumbrados a contestar el teléfono a cualquier hora y ponerse en marcha. Y de la misma manera, no los sorprende ni molesta una eventual “falsa alarma”, que definitivamente no será la primera ni la última.  

Así -con dudas, dolores, temores y emociones- se compone el preludio del parto, ese fenómeno natural en donde culminan los nueve meses de espera y comienza una nueva aventura que durará toda la vida . 

 Nota supervisada por el Equipo Médico de Mamashelp.

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