Amamantar sirve para recuperar el peso previo al embarazo –se calcula que al hacerlo se queman más de 500 calorías al día-, siempre y cuando no hagas dieta, ya que en ese caso atentarías contra la lactancia. (Algunos de los kilos aumentados en el embarazo eran la reserva de grasa necesaria para poder amamantar luego del parto).
Si te sentís bien como para retomar alguna actividad recreativa –como caminatas o natación-, tal vez tus bebés ya sean bastante regulares en sus horarios y puedas disponer de tiempo. Pero si todavía no tenés interés, no te preocupes. Pronto, cuando tus hijos establezcan pautas de comida y sueño más regulares, pasará esa sensación de sentirse desbordada por las circunstancias y te darán ganas de recrearte un poco.
En la última visita al ginecólogo después del parto, éste te hará un chequeo completo antes de darte el alta definitiva. Si te has recuperado normalmente luego del parto y tenés voluntad, seguramente podés retomar las relaciones sexuales, siempre y cuando te sientas con energías suficientes.
Tus bebés son capaces de responder a sonidos de alguna manera: sobresaltándose, llorando o, simplemente, calmándose.
Te recordamos que estos hitos del desarrollo son aproximados, ya que cada bebé es único. Ante cualquier duda, te sugerimos que siempre consultes al pediatra.
* El año tiene 52 semanas. El presente calendario se elaboró sobre la base de un año ficticio de 48 semanas -4 semanas por mes, totalizando los 12 meses del primer año del bebé- con el fin de organizar la información más relevante del mes de vida que esté atravesando el bebé. Asimismo, se respetó la división en meses del primer año de vida dado que todos los parámetros que miden el desarrollo y crecimiento del bebé toman en cuenta un criterio de meses, principalmente, en vez de semanas.