El hecho de ver que tu embarazo está más consolidado contribuirá a tu tranquilidad y seguramente ya podrás comunicarlo a todo el mundo, si todavía no lo hiciste. En tu trabajo, es importante tratar de lograr el apoyo de tu jefe y compañeros porque eso redundará en tu bienestar. Pensá en la mejor forma de cumplir tus responsabilidades y a la vez, de cuidarte.
Por el aumento de tu volumen sanguíneo, tus venas se verán más que de costumbre. Por otra parte, también es probable que sientas congestión nasal debido al efecto del estrógeno que inflaman las membranas mucosas de la nariz.
Los avances tecnológicos en los métodos de diagnóstico son tales que ahora puede averiguarse el sexo del bebé antes de los cuatro meses de embarazo. Sin embarzo, los genitales externos de tu bebé siguen desarrollándose y una ecografía en este período seguramente sirva para confirmar los resultados de análisis previos. Muchos papás y mamás quieren saber el sexo del bebé cuanto antes para adecuar sus expectativas a la realidad: los meses que restan del embarazo servirán para acostumbrarse a la idea de tener un varón o una nena y buscar el nombre.
En el bebé su cuerpo empieza a ser más grande que su cabeza. Ya se han formado una importante cantidad de huesos, y comienzan a crecer las uñas de los pies. La piel es todavía muy fina, casi transparente y es sensible al tacto. Además, el intestino empieza a llenarse de meconio.
Ya mide 15 centímetros y pesa alrededor de 180 gramos.
* Te recordamos que estos hitos del embarazo son aproximados, ya que cada embarazo es tan único y diferente como la mamá que lo vive, y como el bebé que va a tener. Ante cualquier duda, te sugerimos que siempre consultes a tu médico.